Para eliminar este feo efecto y prevenir las humedades, la clásica obra de renovación de juntas implica retirarlas con un rascador, preparar una pasta y aplicarla con una llana sobre toda la superficie limpiando los restos. Nosotros te proponemos una alternativa mucho más sencilla y económica, que requiere menos gastos en material y limpiar una cantidad de superficie menor. Solo tienes que seguir los siguientes pasos:
01 Aplica el producto
Rellena las juntas con una masilla lista para usar. Nosotros te recomendamos ‘Masilla Juntas de Azulejos’,
02 Reparte la masilla y dejar secar
03 Retira los restos con un paño húmedo
Si sólo quieres limpiar las juntas, puedes utilizar nuestro limpiador de juntas que te recomendamos aquí.
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