Pequeños desperfectos en la pared: golpes y agujeros: te enseñamos a repararlos tú mismo con estos sencillos pasos.
01 Preparar la mezcla
02 Aplicarlo sobre la superficie
Rellena el desperfecto con la ayuda de una llana o espátula (o ambas).
03 Secado, retoques
Una vez seco, lija la superficie para eliminar las imperfecciones y límpiala con un paño.
04 Posteriormente puedes repintar la zona restaurada o dar un nuevo acabado a toda la pared, según tus preferencias.
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